Como detectar una infidelidad

5:12 a.m. anthonytr 0 Comments

La infidelidad es un tema muy delicado, y me gustaría tratarla con mucha precaución, porque los celos y la falta de confianza, si son infundados, pueden destrozar una relación de la misma manera que la infidelidad. Por eso primero trataré el tema de la emoción frente a la razón, antes de analizar indicios que podrían delatar un comportamiento inapropiado por parte de la otra persona.

Pasión y razón

Creo haber mencionado más de una vez en el blog, pero por si acaso lo hago nuevamente en este momento, que los seres humanos somos mucho más emocionales de lo que imaginamos que somos. Nos gusta pensar que actuamos de una forma muy racional, cuando en realidad nuestras emociones casi siempre están en medio. Es por este motivo que un juez no puede juzgar el caso de un pariente, o un cirujano no puede operar a alguien cercano.

Decir eso es bastante obvio, pero merece la pena insistir en ello cuando hablamos de la confianza en la pareja y de la infidelidad. La realidad y nuestra percepción de la realidad son dos cosas muy diferentes, y la última está muy influenciada por nuestras emociones. Por eso pueden producirse con frecuencia dos tipos de casos que no nos convienen:

Nuestra pareja nos he infiel, y pese a todos los indicios que tenemos, somos incapaces de verlo, principalmente porque somos incapaces de aceptarlo. En esos casos, si viéramos la mitad de esos indicios en otra pareja habríamos identificado el problema, pero como estamos vinculados tan estrechamente por las emociones, puede pasar mucho tiempo hasta que nos demos cuenta.
Nuestra pareja no es infiel, pero la falta de la confianza en la relación o en nosotros mismos nos hace pensar que cualquier elemento sospechoso (un retraso, una llamada telefónica) es una posible prueba de infidelidad, y a medida que estamos vigilando y controlando más a nuestra pareja, esa se acaba hartando y surge la ruptura.

Es este segundo caso que me preocupa más a la hora de redactar el artículo. Como voy a describir posibles indicios de infidelidad, no me gustaría que fuera para alimentar celos cuando no hay motivos para ello. Por eso no hay que fijarse solo en un indicio, sino en un conjunto de comportamientos.

Los posibles indicios

Muchas veces, la infidelidad surge cuando una persona siente que la relación ya no le aporta mucho, sobre todo desde el punto de vista de la libido, pero no quiere arriesgarse a un cambio drástico y sus consecuencias, y por lo tanto decide mantener una doble vida. Esto da pie a algunos indicios:

Si la otra persona muestra menos interés por la intimidad, las caricias o el sexo, puede ser porque algo de rutina se haya instalado en la pareja y la libido haya bajado, pero más allá de eso podría significar que encontró a otra persona para satisfacer sus necesidades a este nivel.
Un cambio repentino en la apariencia, como cambiar de estilo de ropa, cuidarse más antes de salir, ponerse a hacer deporte y a cuidar la comida puede significar algo muy positivo: que alguien que se había dejado llevar por la rutina está esforzándose un poco más para cuidarse. Pero también podría significar que la motivación es la seducción de otra persona.

Otra categoría de cambios que merece la pena analizar son los que tienen que ver con los horarios de trabajo (o de estudios o de otros compromisos).

Si de repente se multiplican las reuniones de trabajo hasta muy tarde o los desplazamientos profesionales con pernoctación fuera de casa, lo más probable es que sea algo totalmente legítimo, pero también podría ser una excusa perfecta.
Otro ejemplo podría ser el de haberse apuntado a un deporte después del trabajo, motivo por el cuál la persona llegaría más tarde a casa, físicamente cansada y recién duchada. De nuevo, la mayor parte del tiempo será totalmente cierto, pero también podría ser una excelente tapadera para cubrir sesiones de sexo fuera de la pareja.

Otra clase de indicios son los que van relacionados con los móviles y la tecnología en general. Vaya por delante que creo que cada persona tiene derecho a su intimidad, y que sería muy mala idea que la pareja se pusiera a espiar para comprobar si existe infidelidad. Sin embargo, la forma de actuar con la tecnología puede dar bastantes indicios.

Si de repente, la persona se vuelve muy cuidadosa con su teléfono, se lo lleva a todas partes, incluso en el baño y cuando se vaya a duchar, y ha puesto un código para que solo ella pueda acceder al contenido del móvil, quizás no sea nada, o quizás esté protegiendo una infidelidad.
El comportamiento con el ordenador también puede ser sospechoso. Si borra el historial a menudo, usa solo la navegación privada, o cierra las ventana abiertas en cuanto alguien se acerca, podría indicar que está viendo pornografía, o podría ser que está en contacto con alguien y no quiere que se sepa.

Finalmente, la infidelidad es una mentira a gran escala, y por lo tanto, para detectarla el primer paso es darse cuenta cuando la persona está mintiendo. Esto es más o menos fácil dependiendo de las personas. Algunos son muy buenos actores, y otros no son capaces de mentir, al menos no de una forma muy directa. En caso de duda, se pueden hacer preguntas en apariencia inocentes, cuyo objetivo es comprobar si las historias tienen sentido.

Comunicación y sorpresa

Siento que no puedo acabar este artículo sin volver a dos pilares de una buena relación de pareja:

La comunicación es fundamental. Si las cosas van mal, no se puede esperar a ver si se arreglarán solas, hay que hablarlas y tomar medidas, incluso si el riesgo es que se acabe la relación. Mejor una ruptura consensuada que una ruptura tras un largo periodo de falta de comunicación y engaños. Y cuando hay voluntad por ambos lados, se pueden conseguir muchas cosas y una relación plena.
La sorpresa no tiene que faltar. El enemigo es la rutina. Si se instala en la pareja, surge el aburrimiento, la falta de deseo, y de repente persona externa a la relación llegan a verse más atractivas. La infidelidad es mucho más que eso, el aburrimiento no es una excusa, pero sí que es un elemento que acaba pesando y puede favorecer una situación de infidelidad. Así que en las cosas pequeñas como en las grandes, hace falta poner un poco de sorpresa, de cambio, de aventura.